La política de calidad de la Denominación de Origen es clara: ofrecer el mejor kaki posible cumpliendo con los requisitos establecidos en su Pliego de Condiciones, todos ellos adicionales a la legislación vigente en materia de alimentación.
Siguiendo este objetivo y no conforme con ello, la Denominación de Origen ha realizado desde sus inicios distintos convenios con las diferentes administraciones y centros de investigación como el IVIA, AINIA, IATA o la Generalitat Valenciana, para el estudio y mejora en el cultivo del kaki a lo largo de todas sus fases.